Avenida del Aljarafe, 2, 41110 Bollullos de la Mitación
Teléfono: 955 76 52 23
Son muchas las familias y localidades del aljarafe que viven por y para el mosto, y que cuentan con una gran tradición vinícola. Es el caso de Umbrete, Villanueva del Ariscal y Espartinas, que conforman el conocido ‘triángulo vinatero’ que, junto con otras localidades como Valencina, Bormujos, Bollullos, Benacazón o Sanlúcar la Mayor, son una maravillosa invitación a realizar la Ruta del Mosto cuando llega el otoño. El mosto del Aljarafe abastece la mayor parte de tabernas, tascas, bares y mesones de la capital andaluza y sus alrededores. No obstante, por su cercanía y sus encantos, ir a beber mosto al Aljarafe es un deleite que no debemos dejar pasar. El mosto ha sido y sigue siendo un elemento esencial en las relaciones sociales, tanto las de carácter cotidiano, como las ritualizadas. No en balde, muchas de las fiestas y ferias más significativas que se celebran en los pueblos aljarafeños, están relacionadas con la vendimia y la elaboración del mosto. Ahora que estamos en plena época de vendimia y de despalillado y estrujado de la uva, es buen momento para que no acerquemos a una de esas familias que llevan varias generaciones en torno al mosto.
La expresión el Corral de la Pacheca la decimos cuando queremos expresar un lugar donde la confusión, el escándalo y el barullo abunda en demasía. El Corral de comedias de La Pacheca en Madrid, fue un espacio escénico del siglo XVI, localizado en la calle del Príncipe. Ese fue el nombre que inspiró a D. Eugenio Calero, que junto a su esposa María, arrendaron unas viñas en el año 1978, para posteriormente vender su producto en una bodega de suelo de albero y mostrador de chapa, que montó con mucha ilusión, y que con el paso de los años se fue ampliando, debido a la buena aceptación. Hoy en día la familia Calero López, cuida con mimo sus viñas, que se encuentran anexas a la ermita de Cuatrovitas, y en sus 5,5 hectáreas en tierras de albariza poseen vides de las variedades Garrido Fino, Zalema y Macabeo. La bodega se ha convertido en una de las más emblemáticas de Bollullos de la Mitación, produciendo mosto de elaboración propia de manera artesanal. Un mosto que fermenta en unos 80 bocoyes de roble americano, cuidados con esmero. El resultado es un mosto, de color oro pajizo y ligeramente turbio, que se caracteriza por su intensidad aromática. La estética es de antiguo bodegón, con un porche de vigas de madera, con mesas altas para tapear bajo techo. Al entrar vemos un gran número de mesas con sillas oscuras de enea y respaldo alto, una gran barra en L delante de la cocina, y al fondo una espectacular zona de bodega, con las botas de vino y un gran cuadro de la Virgen del Rocío, testigo de las labores de almacenaje del mosto.
Cada vez son más las bodegas, que además de poder disfrutar de sus vinos, ofrecen al visitante la posibilidad de sentarse a la mesa y degustar buena cocina. A nivel gastronómico, la bodega presenta una carta bastante amplia donde destaca el pescado frito y especialidades tradicionales del Aljarafe que ellos sirven en domingos y festivos, como espárragos con huevo, espinacas, garbanzos con bacalao, menudo de ternera, higaditos de pollo, caldereta, carne con tomate, habas con huevo, pisto, albóndigas, migas o paella, especialidades como carnes a la brasa (presa, secreto, costillas, lagartito, solomillo, churrasco, pechuga o pollo frito) además de serranitos 7,50€ y montaditos de pringá o gambas 3,00€. Una sorprendente variedad de pescados, como las acedías, chocos, calamares, cazón en adobo, pescada, puntillitas, croquetas caseras, langostino con bacon, frito variado, huevas o pavías de bacalao 8,00€/16,00€. Pescados plancha como pez espada, chipirón, huevas o atún. Entrantes como el tomate o las papas aliñas, ensaladilla de gambas 3,00€, salmorejo, huevos rellenos, salpicón de marisco 6,00€ o cóctel de marisco 3,00€. Chacinas como jamón, caña de lomo, salchichón, carne mechada, chorizo dulce y picante o morcilla serrana. De marisco gamba blanca 9,00€/18,00€. También tienen variedad en panes de la casa 12,00€. De postre natillas, arroz con leche, flan con magdalenas, delicia de caramelo 3,50€, tarta de queso, chocolate blanco o negro, y tarta de turrón 4,50€. Como podéis comprobar una gran variedad para todos los gustos.
El secreto de su fama es sencillo: Buena cocina, con especialidad en guisos tradicionales, pescados y carnes ibéricas, un menú sencillo regado siempre con vino de la tierra en honor al origen de esta bodega, destinada a la crianza del singular mosto del Aljarafe. Dice su semblanza que aquí siempre se recibe a sus clientes haciéndoles sentirse como en casa y así hacerles pasar una estancia agradable. Así fue como me recibieron Eugenia y Susana, con amabilidad y simpatía, algo que les agradezco de corazón. Apoyados sobre la gran barra, dos vecinos de avanzada edad charlan copa de vino en mano sobre el progreso de la cosecha de este año. Definitivamente este es de esos sitios que enamoran nada más entrar. Como narra el final de la letrilla del poema de Pedro López “Y cerca de la Viña de la Pacheca, donde el forastero la viene a ver, el rubor de su cara que es fina seda, eclipsaría al sol del amanecer”. Gracias por vuestra hospitalidad y por mantener vivo el hermoso legado de Don Eugenio.