Avenida Clara Campoamor, 12, 41900 Camas
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En los últimos años el sector de la restauración sin gluten ha crecido de manera significativa y a día de hoy encontramos restaurantes responsables, comprometidos con el colectivo de pacientes con celiaquía o sensibilidad al gluten/trigo no celiaca en todo el país. Pero algunos de ellos dan un paso más en este compromiso y convierten su restaurante en 100% sin gluten. Un refugio de tranquilidad y seguridad para todos aquellos que tienen que vivir de forma estricta, sin gluten. Hay que recordar que cuando hablamos de restaurantes 100% libres de gluten nos referimos a aquellos cuya carta es apta al completo, aunque normalmente estos restaurantes tienen pan con trigo y cerveza con gluten, para los clientes no celiacos que lo solicitan. En Sevilla ya no es una utopía encontrar una carta pensada solo para personas celíacas. La provincia cuenta con varios restaurantes aptos para este colectivo. Hoy volvemos a mi pueblo para hablaros de Tía María, una cervecería freiduría sin gluten que lleva poco más de un año abierta en la zona nueva de la Barriada Hiconsa, junto al Carrefour Camas.
Al frente de Tía María encontramos a Narek Sargsyan, un joven empresario hostelero nacido en Armenia que lleva más de 25 años en España, casi la totalidad de su vida. Narek es un gestor/contable que comparte la dirección con su socio y amigo Pedro García, con el que conserva una amistad desde pequeño. Pedro comenzó con los negocios de hostelería hace unos cinco años, montando establecimientos tan famosos como Macao Tapas o Misuri Lounge Bar, los dos en Camas. Cuando encontraron el local de Tía María, Pedro le propuso a Narek formar parte del proyecto. Una “freiduría sin gluten” que nace de la necesidad de cubrir una carencia que tenía el pueblo con respecto a la sensibilidad al gluten. El nombre salió de una “tormenta de ideas”. Les gustó la ocurrencia que siempre decía la abuela de Pedro cuando saludaba a sus vecinos del Ronquillo “Buenos días Tía María”. A pesar de haber crecido en Camas, esta nueva zona del municipio me resulta bastante desconocida. La barriada se localiza a un corto trayecto de la capital hispalense y rodeada de todos los servicios necesarios. Esta ubicación se ve reforzada por la cercanía a un gran Centro Comercial. El local de Tía María ocupa una esquina de esos nuevos edificios y tiene un cierto estilo náutico de taberna marinera, de ese tipo de ambientaciones sencillas que destacan por su versatilidad. Con una barra de servicio a la derecha, con ventana al exterior para el servicio de los camareros, un gran mural de una barca de pesca al fondo, lámparas colgantes de ratán, paredes pintadas en colores verde agua y el suelo de lamas imitando madera. Grandes cristaleras al exterior permiten que el salón sea muy luminoso de día. Fuera, una gran terraza cubierta con calentadores para el invierno.
La carta comienza con entrantes como la ensaladilla de pulpo, de gambas al ajillo 3,50€ o la ensaladilla templada con huevo frito 7,90€, papas aliñas al Jerez 3,70€, patatas (bravioli, roquefort con jamón o carbonara) 3,80€ o el guacamole Tía María 7,90€. Podéis seguir con la croquetas de gambas al ajillo, de carrillada o de jamón, tiras crujientes de pollo, risotto de setas o de carrillada 3,80€, wok de solomillo, de langostinos o de verduras 3,90€, champiñón bombón 4,50€, pulpo con parmentier 11,50€, revueltos de bacalao dorado 7,90€, sartenada de huevos fritos y jamón 8,90€ o bacalao con tomate 4,50€, arroz meloso con solomillo y carrillada, arroz negro con alioli 8,50€, coquinas en salsa 11,90€ o almejas marinera 10,50€. Aquí los fritos se hacen con harina de garbanzos: Mero al limón, chocos de Huelva, boquerones en adobo, taquitos de bacalao, adobo sevillano, huevas fritas 4,20€ o el frito variado 16,00€. Para los carnívoros tenéis el secreto o el lagartito ibérico 4,50€, solomillo y pollo al roquefort, whisky o carbonara 4,20€, San Jacobo casero 8,50€ o la carrillada en salsa 4,50€. En pan, montaditos piripi, langostinos con alioli, mantecao, solomillo con jamón 3,80€ o serranito 5,90€. Fuera de carta tenían carne con tomate, tataki de atún, gambas fritas con calamares del campo, langostinos tigre, gambas frescas o pijotas. De postre, tarta de queso o coulant de chocolate con helado 5,50€.
Si a veces no resulta fácil encontrar un restaurante que garantice una carta libre de gluten, la situación se complica si se trata de fritos, pero si esto no fuese poco de por sí, se convierte en misión casi imposible si existe también alguna intolerancia a la lactosa. Con el único objetivo de saborear platos exquisitos, tanto si te han diagnosticado celiaquía, tienes sensibilidad al gluten o la lactosa, pero sobre todo, si eres amante de la buena gastronomía, deja de buscar dónde puedes ir, porque hemos encontrado un rincón en Camas que te va a encantar. Porque existe un mundo más allá del filete con ensalada, y porque hay que desmontar mitos sobre la comida sin gluten, en Tía María podréis disfrutar de buena cocina a un precio súper económico. Nuestra cuenta para tres personas fue de 39,30€. Me alegro que este en mi pueblo. Tenéis que conocerlo.
