Callejón del Blanco, 2, 11008 Cádiz
Teléfono: 699 33 94 23
En Cádiz se les dice “Beduinos” a los gaditanos que viven fuera de las Puertas de Tierra. Estas puertas marca la frontera entre el casco antiguo de Cádiz y el Extramuros. Beduino es el nombre elegido por el cocinero gaditano Ale Alcántara para su nuevo local. Ve así cumplido por fin su sueño de abrir un restaurante en su ciudad natal, donde sus padres, Alejandro Alcántara y Bubi Martínez, tienen también su propio establecimiento, Dosbocados, en el mercado central de abastos. Hijo, sobrino y nieto de hosteleros, este mediático cocinero fue discípulo de los prestigiosos chefs Martín Berasategui, Eneko Atxa o Sergi Arola. Ale se formó en el Instituto Provincial Fernando Quiñones de Cádiz, y cuando termino se trasladó a Madrid. Paso por el restaurante Lasarte de Martín Berasategui, y de ahí al Carlton de Tenerife, Su inquietud por conocer la cocina internacional lo llevó a Londres y Brasil. Se hizo muy popular por su participación en “Masterchef” y “Cocineros al Volante”, así como por su colaboración en “El Show de Bertín” en Canal Sur o por darle de comer al expresidente de Estados Unidos, Barak Obama, en su restaurante de Sevilla. Pero lo que realmente le hace feliz, es ponerse al frente de los fogones para sacar un pedacito de Cádiz en cada bocado. Despues de pasar por varias ciudades, Ale pone sus mesas mirando a la Playa de la Victoria, en el emblemático Paseo Marítimo de Cádiz, para el disfrute de paisanos e incondicionales como nosotros.
Pero hablemos de Beduino. El restaurante está ubicado en el local donde antes estuvo Barra Siete o La Tapería del Paseo. Un atractivo establecimiento en el que se ha respetado la estructura original, con una barra amplia forrada de mimbre natural y sillas altas para tapear, y dos terrazas para disfrutar de un cóctel contemplando la hermosa puesta de sol de la capital gaditana. Grandes cristaleras proporcionan a los clientes unas agradables vistas de la playa. El ambiente es acogedor y luminoso: Mesas de madera, lámparas de ratán y piezas de terracota en una enorme estantería. Las paredes de cemento están rematadas con una textura de estuco terciopelo, dándole un aspecto que mezcla lo industrial con lo rústico. El servicio es súper atento y muy agradables en el trato, todos con equipo informático para hacer llegar las comandas directamente a cocina. Imaginativo, viajero y trabajador, Ale apuesta definitivamente por sus raíces, usando productos de su tierra en gran parte de la carta. Junto a las técnicas aprendidas de la mano de los mejores maestros de la cocina, destaca el uso de ingredientes andaluces “Me di cuenta que lo que llenaba mi corazón era viajar a mis raíces. He ido adaptando mis recuerdos y sabores de la infancia en mi cocina”. Unos recuerdos que están presentes en ingredientes como el pescado azul, el cerdo ibérico o en sus sabrosas verduras. Los comienzos no han podido ser mejores, ya que Beduino dobla mesas todos los días desde que abrió, convirtiéndose en la apertura más destacada de este verano en la ciudad.
Su carta rezuma salud, tradición y actualidad. Grandes materias primas como verduras, hortalizas, pescados y carnes, además de productos tradicionales de nuestra tierra, como son los vinos, aceites o los panes artesanales, muchos de ellos, de pequeños productores locales y de la máxima calidad. Sabores tradicionales e ingredientes frescos y de temporada, con una oferta centrada en platos para compartir, ofreciendo recetas clásicas con una elaboración moderna. Las propuestas nos llegan en forma de platos sencillos y sin parafernalia, donde los protagonistas son los productos de Km 0, en buena parte ecológicos, como tomates, alcachofas, calabacines… Un “cuarto frío” con pan artesanal con ajos asados, tomate y alioli 7,00€, ostras al natural 3,50€ o con ponzu o klamato 4,00€ o una sabrosa ensaladilla con camarones fritos y salicornia 4,50€. Entrantes como los tallarines de calabacín con pesto rojo 10,00€, bravas raras con mojama 5,50€, alcachofas parrilla con humus de manzana asada 13,00€, sándwich de costilla asada 9,00€, una sabrosa caballa frita con piriñaca thai 11,00€ o el steak tartar con patatas fritas 22,00€. Varios arroces como el de pollo y bacalao 22,00€, arroz seco con zamburiñas 18,50€ o el cremoso con carpaccio de carabinero 21,00€. Pescados y mariscos como el tarantelo de atún 19,00€ o el pulpo a la brasa con boniato 22,00€. De las carnes no os perdáis la cabezada de cerdo 16,00€ o el chuletón de vaca madura a la brasa 70,00€/kg. Un “final feliz” con tiramisú, brownie de chocolate, tarta de manzana con helado o bizcocho de almendras.
En su carta nunca falta una extensa variedad de vinos de la tierra. «He viajado por muchos sitios, pagando precios altos por vinos mucho peores que los que tenemos aquí”. Ale sabe aprovechar los pocos momentos libres que tiene para estar con su mujer y sus niños, ya que lo considera el mayor placer de su ocio. No pudimos verlo el día que fuimos a comer, pero le mandamos un abrazo y toda nuestra energía en esta nueva aventura. Facultades no le faltan a Beduino para convertirse en una parada obligada para todo el que visite la capital gaditana y guste de disfrutar de una actualizada gastronomía local. En Beduino os esperan “con los brazos abiertos y los fogones encendidos”. Nuestra cuenta para dos personas, con botella de Godello del Bierzo incluida, 76,90€. Un precio extraordinario para la calidad de una comida llena de sabor que mira al Atlántico gaditano. Gracias por vuestra hospitalidad. Volveremos.
