Calle Eslava 3 Sevilla
Teléfono 954 90 65 68
Cuando Sixto Tovar abrió el restaurante Eslava allá por octubre de 1988, nunca pudo imaginar que en estos 35 años se convertiría en el arquetipo del mejor tapeo sevillano. Los parroquianos y los miles de visitantes que cada día se juntan en este negocio, han podido comprobar durante más de tres décadas, como un lugar ajeno al hogar familiar, se convierte con el paso del tiempo en una segunda casa para muchos de ellos. Eslava va mucho más allá de un bar de tapas. Este local se ha convertido en el vecino más ilustre de San Lorenzo, un sitio emblemático para la comunidad local y para todo el que viene de fuera buscando el mejor tapeo. Pero a todos nos llega la hora de retirarnos, y Sixto deja la hostelería eligiendo a dos grandes empresarios del sector para pasarles el testigo de uno de los establecimientos más aclamado de Sevilla. Los nuevos dueños parten del objetivo de que “todo siga como siempre” y que el cliente no perciba el traspaso. Y en el poco tiempo que llevan al frente de Eslava, parece que lo han conseguido. Pero de todas formas hemos ido a valorar el nuevo Eslava para saber de primera mano si es cierto que todo permanece, que nada ha cambiado.
Con un sentimiento de honorabilidad por haber resistido tantos años y haberse convertido en el epicentro de encuentros de amigos y turistas, Sixto pone ahora el futuro del local en manos de dos empresarios que pretenden continuar con su legado. Este maestro hostelero ha encontrado dos dignos sucesores para ponerse al frente del negocio, manteniendo su personal y su carta. La operación tiene mucho de sentimental y el reto principal es mantener la calidad que siempre ha ofrecido “Nuestro gran desafío es que la marca Eslava perdure en el tiempo”. Para ello lo fundamental es que no cambie la atmósfera de un espacio que lleva 35 años funcionando. Eslava fue precursor de las tapas creativas en el centro. Empezaron a ofrecer una carta diferente y arriesgada que en aquella época no era nada común y sorprendía a los clientes, congregando hasta otros profesionales de la hostelería para conocer su propuesta. Tapas que ahora parecen muy normales pero por aquel entonces no era común ver algo así en la ciudad. En la actualidad, Eslava conserva el aroma especial que dejan la excelente comida y los buenos ratos pasados por su clientela. También su apuesta por una barra variada, ya que ofrece alrededor de medio centenar de tapas diferentes, que podéis ver en sus famosas pizarras, modernizándose de forma constante. El secreto de Eslava siempre ha sido una premisa simple pero que solo los mejores logran llevar a cabo con éxito: Ofrecer calidad a un buen precio y con un servicio excelente.
Isabel Capote continúa como Jefa de cocina desarrollando una carta que mantiene esos platos emblemáticos que están en el imaginario colectivo de todo aquel que se plantea ir de tapas por San Lorenzo. Platos con nombre propio como la yema sobre bizcocho de boletus, el cigarro de Bécquer o las exquisitas costillas con miel de romero 12,70€. Pero la extensa carta de Eslava ofrece muchas más opciones, en su gran mayoría en formato tapa, para agasajar a sus clientes. Croquetas caseras de ternera y cerdo 3,80€, strudel de verduras 4,50€, charlota de calabacín 4,50€, alcachofa con bacalao 4,70€, frituras como las acedias, salmonetes o pijotas 6,50€, huevo patatero 6,50€, olla gitana 4,20€, cabrillas en salsa 4,80€, un extraordinaria sangre encebolla 4,50€, garbanzos con chorizo 4,20€, pudding de merluza y gambas 4,60€, micuit de foie y frutos rojos 5,20€ o el molletito de pringá 4,50€. Tataki de lomo de vaca con crema de boniato 4,70€, magret de pato 4,80€, brazuelo de cabrito 28,00€, pierna de cabrito 28,00€ o codillo de lechazo 18,00€, sin olvidar el lomo de pargo 24,00€, ventresca de pargo 18,50€, cacheta de pargo 22,50€, tarantelo de atún 26,00€ o caballa asada con piriñaca 5,50€. De postre no os perdáis el sokoa 6,20€, la tarta de queso 6,20€ o el tiramisú 6,40€, acompañados con alguno de sus vinos dulces. Importante carta de vinos, con un apartado de vinos por copa, algo que siempre es de agradecer.
Habíamos oído voces que decían que Eslava había cambiado para peor con el traspaso. Imagino que será porque en este país todo el que destaca en algo, acumula enemigos que siempre están al acecho para intentar hacer daño. Pues os puedo asegurar de primera mano, que Eslava sigue en plena forma, no solo con lo que sale de cocina, con el servicio, con esa barra y esa terraza abarrotada de clientes escogiendo tapas de sus pizarras. Eslava esta mejor que nunca. En definitiva, los mejores recuerdos que suele dejar un viaje están muchas veces relacionados con los pequeños momentos de placer que se viven alrededor de una buena mesa. Conocer una ciudad es conocer su gastronomía y si se trata de Sevilla, con más razón. Aquí tapear es una religión. En Sevilla existen alternativas para todos los paladares. Desde los bares más tradicionales a los fogones más creativos, encontraréis propuestas de todo tipo que han colocado a la ciudad como una de las capitales culinarias de Andalucía. Eslava se sigue alzando con un lugar merecidísimo en el podio de bares de la capital que permanecen en el corazón de los sevillanos por ser “uno de los sitios donde mejor se come de toda la ciudad”. Un establecimiento que no solo permanece, sino que se reivindica como uno de los imprescindibles si queréis conocer la mejor oferta gastronómica de Sevilla.
