San Diego, 4, Norte, 41015 Sevilla
Teléfono: 691 09 20 78
Una de las cosas que no falla en la mayoría de los bares, es la falta de estabilidad de algunas mesas, ya sea por la misma mesa o por un suelo mal nivelado. Todos hemos tenido que lidiar con mesas cojas que nos han fastidiado más de una comida. Un detalle tan tonto puede arruinar el disfrute de un momento que se supone relajado, especialmente si la cojera provoca derrames de copas o platos al suelo. El apaño más habitual consiste en calzarla con servilletas o lo que tengamos a mano, pero las matemáticas ofrecen la solución más sencilla y efectiva. Se trata de girar la mesa hasta encontrar una posición fija. Normalmente basta con hacer un pequeño giro, sobre su propio eje, inferior a 90 grados, es decir, un cuarto, pues la pata coja encontrará estabilidad antes de alcanzar la posición que tenía inicialmente la pata más cercana hacia la que la estamos girando. Se acabó lo de calzarla con papeles que se deforman y a menudo terminan siendo un remedio peor que el problema inicial.
Este nombre tan singular y divertido es el que han elegido Carlos Pickman y Jorge Real para su nuevo establecimiento en San Diego. Un bar “con mucho arte” que lleva poco más de un mes abierto y que ha entrado con buen pie en un barrio como San Diego, que a pesar de no estar en el centro turístico de la ciudad, ofrece una calidad de vida excepcional y una comunidad vibrante. Ubicado al norte del casco histórico, San Diego combina a la perfección el encanto tradicional de los barrios sevillanos con las comodidades modernas. Jorge y Carlos se conocieron con cuatro años en el Colegio Alfonso X el Sabio del Porvenir, su barrio de origen. Vinculados al mundo de las telecomunicaciones, estos dos compadres abrieron un Mar de Gambas en Los Bermejales antes de la pandemia, una franquicia que estuvo varios años funcionando hasta que Jorge lo dejó en manos de su socio. Ahora se aventuran en un nuevo proyecto situado en un barrio que les es ajeno, pero en el que han entrado con ganas y aceptación por parte de los vecinos. Este antiguo local del “Pibe” no da para mucha mesa dentro, pero tiene una gran terraza y una amplia cocina donde se elabora un tapeo clásico, con mucha cuchara, como gusta a sus parroquianos. La barra de servicio con taburetes altos, invita a acodarse para disfrutar de algunas de sus tapas.
Una carta que comienza con tapas frías como la ensaladilla de melva 4€, papas aliñas 3,8€, boquerones en vinagre, papas alioli 3,8€, pimientos asados con melva 4,2€ o tomate aliñado con melva 9€. Productos de abacería como mojama 4,8€, queso boffard 4€ o los montaditos de caballa, queso y anchoas, mejillones o anchoas 3,5€. Entre los fritos su famosa tapa de huevos fritos con patatas y chorizo 4,5€ o con tomate casero 4€, calamares del campo con chipirones y mayonesa de piquillos 4,2€, los sabrosos filetitos rusos 4,5€, pollo frito 4,5€, lagrimitas de pollo 4,5€ o de atún, boquerones fritos 4€, cazón o boquerones en adobo 4€, o el solomillo de cerdo con la salsa que más os guste 12€. De cocina tenéis las espinacas con garbanzos 4€, papas con chocos 4,2€, carne con tomate 4,2€, carne en salsa 4€, menudo 4€, pisto con huevo, atún encebollado 4,5€, mini serranito pollo 3,5€, champi plancha con jamón 4€ y las patatas fritas con mojo, carbonara, queso y bacon, tomate frito, whisky, pimienta o mayonesa 10€. Panes de la casa de salmorejo con huevo duro y jamón, melva con pimientos o paté de mejillones 11€. De postre, tarta de queso al horno y caramelo o crema catalana y brownie 3,5€.
Es hora de reivindicar esos guisos caseros que trascienden modas. Aquí encontrarás buena cocina casera sevillana, tapas seculares y platos de cuchara de los de toda la vida. Esto es cocina local, removida lentamente con saber y dedicación. A partir de ahora el tiempo deja de correr y solo importa ese plato de papas con chocos que acaba de llegar a la mesa. Aún hay bares y restaurantes que se resisten a los ‘foodies’ y al poder de TikTok. Lugares que se recomiendan a regañadientes para que no se llenen. La Mesa Coja es de esos bares que solo recomiendan los que saben. Guarda el secreto, que quede entre nosotros. Gracias a Carlos y Jorge por su hospitalidad. Volveremos.
Si buscas salir de la rutina,prueba “la pata coja” en san diego. Personal muy profesional y a la vez muy cercanos. Lo recomiendo sobre todo por su limpieza.
Perdón,si nombre es “la mesa coja”