Calle Julio César, 5, Casco Antiguo, 41001 Sevilla
Teléfono: 621 30 12 59
Sarita Colonia fue una figura popular en la religiosidad peruana, considerada una santa no oficial por muchas personas, especialmente en los sectores más humildes del país. Aunque no ha sido reconocida por la Iglesia Católica, es venerada como una santa popular y protectora de los marginados, presos, trabajadores sexuales y migrantes. Se dice que era una mujer piadosa y solidaria con los más necesitados. Murió de malaria a los 26 años y fue enterrada en una fosa común en el cementerio del Callao, un camposanto que con el tiempo se convirtió en lugar de peregrinación. Allí, la gente le reza y deja ofrendas, creyendo en su intercesión para conceder milagros. Su culto ha crecido con los años, expandiéndose por varias partes del Perú y otros países con comunidades peruanas. En la cultura popular, Sarita Colonia ha inspirado canciones, obras de arte e incluso referencias literarias. Así nació el culto a Sarita Colonia, la santa popular que cuenta con miles de devotos en Perú y en el mundo entero. Este es el críptico nombre elegido para un restaurante que acaba de abrir en Sevilla y que fusiona sabores de la cocina peruana tradicional con influencias orientales y fórmulas callejeras, todo en un ambiente descarado y divertido. Además, destaca por su innovadora “gastronomía líquida”, con una amplia variedad de cócteles, y todo servido en un entorno kitsch y maximalista.
Bienvenidos a Sarita Colonia, el “antro chic” del que todos hablan, “un lugar donde la comida callejera más deliciosa se encuentra con vistosos cócteles”. ¿Buscáis algo diferente? Aquí tenéis un sitio para disfrutar con los cinco sentidos, donde el buen rollo es obligatorio. Este templo del hedonismo es el nuevo proyecto del chef y creativo Álvaro García, quien, junto con el interiorista Jesús Pino, han creado un pequeño espacio visualmente impactante. Álvaro García, originario de Córdoba pero con raíces en Motril, forjó su camino en la gastronomía tras un amplio recorrido profesional. Su trayectoria comenzó en el sector de la restauración como camarero, evolucionando hasta formarse en hostelería. A lo largo de los años, adquirió experiencia en diversas cocinas, incluyendo la cadena Sol Meliá y reconocidos establecimientos en Granada. Su afán por aprender lo llevó a Italia, donde trabajó bajo la dirección del chef Roberto Petza en un restaurante galardonado con una estrella Michelin, perfeccionando técnicas de alta cocina. A su regreso a Motril, el azar le brindó la oportunidad de reabrir El Zarcillo, un restaurante en el que había trabajado anteriormente. Junto a su amigo Manuel, lo convirtió en un espacio gastronómico de referencia, donde fusiona la tradición andalusí con una propuesta innovadora, reflejando su pasión y creatividad en cada plato. Polímata incansable, también gestiona Cacao, una Consultora y Agencia de Creatividad estratégica. Ahora traslada este establecimiento de Motril al centro de Sevilla, pero manteniendo su esencia: Con velas, flores y una pasión por sorprender con vajillas y cristalerías impresionantes, dando forma a un espacio único que no deja indiferente. Sarita Colonia es un homenaje a la querida niña peruana de los milagros, la heroína popular que transforma la rabia de la marginalidad en un bálsamo de tolerancia y respeto. El interiorismo del local es una mezcla entre lo místico y lo irreverente, con un toque teatral y barroco, destacando las lámparas de araña de cristal, los altares, el reloj antiguo de madera de estética vintage o las esculturas de querubines con trompetas en las paredes, evocando el arte ornamentado. Una historia de contrastes que envuelve al cliente desde el momento en que cruza la puerta.
En Sarita Colonia, el protagonismo está en los cócteles, con una selección que va mucho más allá de lo convencional. Podéis comenzar la velada con una botella de champagne, avanzar hacia tragos exclusivos y culminar con una Hostia Forte, un licor único que asegura una experiencia mística. Cada cóctel está diseñado para sorprender, invitando a disfrutar de la noche con un espíritu vibrante y desinhibido. Cócteles como la Mimosa de mandarina helada 13,50€, Mojito filtrado 9,00€, Pisco drop 9,00€ o la Estrella del porno 9,00€ (vodka, vermut blanco y toque de vainilla). Sin embargo, la oferta no se limita a las bebidas. La cocina de Sarita es un verdadero festín de sabores que fusiona lo mejor de la gastronomía peruana con influencias orientales y toques de la comida callejera. Tapas calientes como la empanada margariteña de ternera 4,50€, patatitas gratinadas con chipotle 4,50€, taco dorado de ternera 4,00€, brocheta de pulpo brasa 7,50€, arepita de cochinilla pibil 4,50€, tequeño venezolano con queso trufado 3,50€, pollo frito crujiente coreano 6,00€. Platos como la ensalada de pollo crujiente 16,00€, ensaladilla japo con tartar de atún 18,90€, causa limeña de pollo ranch 16,50€, nachos chilaquiles 13,50€, ceviche mixto 17,90€ o los noodles con verduras 16,00€. Carnes como el lomo saltado de vaca 26,00€, pollo salteado con langostinos 17,00€, tagliatta trinchada 28,00€ y las hamburguesas Sarita 11,00€, Coreana 14,00€, la Milagro, con hígado de oca 17,00€ y la hamburguesa de pollo crujiente 15,00€. Los pequeños tienen para elegir entre 3 primeros platos, postre y bebida 15,00€. De postre, tarta de queso, olla de chocolate, mochis japoneses de mango o tarta tres leches limeña 8,00€. La próxima semana inician el servicio a domicilio, que permite que disfrutéis del menú en la comodidad de vuestra casa.
Si buscáis algo original para vuestros eventos privados, Sarita Colonia Bar ofrece la posibilidad de alquilar el restaurante completo. Una oportunidad para disfrutar de una noche sin restricciones, con la opción de comer, beber, bailar y celebrar con total privacidad. El local tiene capacidad para 30 personas en su interior y 20 más en su terraza, garantizando un ambiente íntimo y personalizado. El resultado es un extravagante espacio donde la “demencia kitsch” y el maximalismo, conviven con un diseño audaz de colores vibrantes, creando una atmósfera que despierta la creatividad. Con un servicio de sala atento y cercano, Sarita Colonia no es solo un restaurante, es una experiencia completa que combina comida, cócteles y un ambiente auténtico y provocador. Una de esas aperturas que dará mucho de qué hablar esta primavera, por un ticket medio de 30,00€/pax.