Avenida de la Arboleda 26, 41940 Tomares
¿Qué puede tener de interés que le hagamos un artículo a una pequeña taberna del Aljarafe de reciente apertura? En primer lugar me motivan los negocios sencillos regentados por gente joven con ganas de salir adelante. En segundo lugar porque está a pocos metros de mi trabajo y les sirve a mis compañeros para saber donde tomar una cerveza fría después de la jornada laboral. Y en tercer lugar porque me lo puedo permitir, ya que en mi contenido mando yo. Otros no pueden decir lo mismo. Las personas tenemos una tendencia natural a valorar más positivamente lo que tenemos cerca, lo que conocemos y sentimos como nuestro. Una clave para entender por qué nos gustan tanto este tipo de establecimientos es que cada uno es diferente, pero todos comparten ciertos elementos que los hacen muy reconocibles. Por ejemplo, la atención es mucho más personalizada. En cuanto hayas acudido un par de veces, el camarero no olvidará tu nombre. Además, solemos encontrar siempre a los mismos clientes, algo que favorece la interacción con otras personas.
Abierto el 23 de diciembre del pasado año, este local de Tomares está regentado por Jesús Martínez, un empresario que procede del sector de la moda y que se estrena en el mundo de la hostelería. Jesús comenzó muy joven en el sector textil y siempre tuvo el deseo de tener su propio negocio hostelero. Para ello busco un coparticipe del proyecto y montaron la Sociedad Garvamar SL, que es la que gestiona Juan Breva, un nombre, cuanto menos curioso, para su primer establecimiento. Y es que Antonio Ortega Escalona (Juan Breva), fue el más grande de los cantaores flamencos de Málaga. El sobrenombre lo heredó de su abuelo paterno, que vendía frutas y brevas mientras pregonaba: “De los montes de Vélez traigo mis dulces brevas, las doy para probarlas”. Destacó desde muy joven cantando verdiales y bandolás, en las fiestas y reuniones de su pueblo. No se sabe si la expresión “Ser un Juanbreva” alude a este cantaor malagueño, pero en Andalucía se usa para definir a una persona de carácter flojo, sin ganas de hacer nada, ‘sin espíritu’. Juan Breva es también esta taberna abacería situada en una de las millas de oro del Aljarafe. Tomares amplia así su oferta de ocio gastronómico con un pequeño local que destaca por sus quesos, su variedad en vinos y su cerveza helada. Nos atiende con amabilidad Carlos Duran, un joven profesional que estudió en la Escuela de Hostelería de Sevilla (Promoción 2022). El espacio interior es diáfano, casi minimalista, con una gran barra y mesas altas, paredes blancas solo adornadas por algún cuadro y una pequeña colección de botijos y vasijas de barro que cuelgan de soportes metálicos. Fuera, una pequeña terraza con cuatro mesas altas para disfrutar del solecito primaveral.
La oferta de Juan Breva es sencilla y casi se intuye antes de entrar. No tiene cocina, así que casi todo es en frío. Ibéricos como el tocino 2,80€, morcilla de hígado 3,00€, chorizo picante y morcilla de Jabugo 3,20e, morcón y salchichón 3,50€, paleta de bellota 3,80€ caña de lomo 4,00€ o el variado 14,00€. Gran variedad de quesos en aceite 3,20€, Apolonio, Manchego al romero, Payoyo, Cabrales, con boletus, trufado, de ajo negro 3,80€, con mango y naranja, con vino tinto, con cerveza Guines 4,00€ o la tabla variada 14,00€. Picoteo de ensaladilla 3,50€, chicharrón frito o de Cai 3,00€ (su tapa estrella), tortilla o conserva de piquillos rellenos de carne 5,00€. De la mar, mojama 3,50€, anchoa Imperial 2,50€, sardinilla 6,50€, mejillones en escabeche 6,00€, calamares en su tinta 4,50€, caballa en aceite 4,70€, melva 6,00€ o banderilla de atún y queso 4,00€. Variedad en montaditos de pringá, morcilla, chorizo picante, tocino y queso, paté de pato y queso, chicharrón de Cái y mojo, solomillo al whisky 3,50€ o el Juan Breva de guacamole con sardina y queso trufado. Las tostas son de carrillá, espinaca y queso azul 10,00€, lomo al whisky con jamón o la de gulas y gambas al ajillo 12,00€. Los guisos son cuatro: carrillada al oloroso, carne con tomate, espinacas con garbanzos o albóndigas de choco 5,60€. Una pequeña bodega, bien diseñada para maridar el tapeo, con vinos tintos como Caballero Mendoza, Celeste, Finca Resalso, Hacienda Solano, Marqués de Murrieta, Habla del Silencio, Paraje de Mincal o el sevillano Zarco. Blancos como Neno Godello, Martin Codax o Rey santo, además de Espumosos y Olorosos.
Pese al poco tiempo transcurrido desde su apertura, el local soporta llenos todos los fines de semana. El objetivo de estos empresarios es crecer poco a poco y montar sucursales del negocio en otros puntos de Sevilla. En esta inminente primavera, el fin de semana empieza a sentirse desde el jueves. La gente ya busca donde hacer un tapeo post-faena, despejarse del curro, pasar de la extenuante jornada laboral y empezar el cachondeo junto a los colegas. Formato barra, mesas elevadas y una terraza ideal para este tiempo, Juan Breva es el bar de toda la vida, el de la esquina. Ese sitio que entre cañas, vinos y tapas, consigue que olvidemos un ratito las preocupaciones. Mis compañeros de trabajo lo frecuentan desde su apertura, sobre todo por la relación calidad-precio y la atención del personal. Su misión no es otra que reivindicar el tapeo de toda la vida, los buenos quesos y embutidos. Ideal para ir con amigos, en petit comité o no tan petit. Le deseamos mucha suerte a Jesús y todo su equipo en esta aventura.
